TEATRO

Un manicomio de “Locura”

Por: Tainari Carmenaty para People Music

La comedia “De manicomio,” escrita por el norteamericano Christopher Durang (“Beyond Therapy”), se presenta en Puerto Rico traducida al español con excelente adaptación y bajo la dirección de Emineh De Lourdes para ofrecernos una historia que mezcla el sexo, el amor ylas posibles decisiones que a las que se pudiese llegar dentro de una relación.

El guion, muy bien estructurado, muestra a Prudencia (Blanca Lissette Cruz), que es una mujer perfeccionista y que no encuentra el amor fácilmente debido a sus exigencias. En la decisión de cambiar su vida empieza a tomar terapia psicológica con el Dr. Fragoso (René Monclova) con quien también intentó una relación, pero esta no funcionó. Mientras Bruce (Ulises Rodríguez), un bisexual depresivo que sostiene una relación amorosa con Robert (Raymond Gerena), se da cuenta de que quiere casarse y formar una familia con una mujer, sin tener que abandonar a su pareja por lo que decide también, buscar terapia psicológica con la doctora Quintana (Lizmarie Quintana). Ambos psicólogos les recomiendan a sus pacientes lanzarse y buscar a esa persona que desean en su vida, por lo que ambos crean un perfil en la página “Ok Cupid”. A raíz de este suceso, se conocen y comienzan a citarse para conocerse en un restaurante donde transcurre la mayor parte de la historia.

Por su parte, la doctora Quintana que representa a esas personas un poco despistadas, con algún tipo de afasia y corta memoria, vive su vida guiada por la pasión y motiva a sus pacientes a hacer lo mismo, a pesar de no tener claro con cuál de ellos habla en ese día. En contraparte, el doctor Fragoso que es un poco dominante, controlador y misógino, intenta convencer a su paciente Prudencia, de tener relaciones sexuales con él y hasta de formalizar la relación si fuese necesario, con tal de convencerla.

Una comedia llena de enredos donde, sin dudas, cada línea tiene importancia con la intención de hacer reír y por qué no, de meditar. Quizás poco creíble, pero llena de energía y en donde la terapia no tiene sentido alguno… porque están todos; ¡De manicomio!

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